Por Raúl Diez Canseco Terry*
A diferencia del pasado reciente, no basta con tener ‘buen ojo’ para los negocios o dejarlo todo al azar. Ahora la gestión es un arte, una profesión, lo que implica conocer conceptos, entender técnicas y manejar instrumentos.
A los emprendedores modernos ya no les bastará hacer las cosas o guiarse por el sentido común. Hoy para competir y ser exitoso se necesita una mínima dosis de conocimiento de los nuevos escenarios y las fuerzas que los impulsan.
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Pero ojo, los conocimientos apoyan los instrumentos de generación y gestión de ideas de negocios, pero el dominio del entorno en el cual aparecen las oportunidades juega su papel y este resulta fundamental para el éxito o fracaso de un proyecto empresarial.
No hay nada más fascinante que ser promotor de la creación y el despertar del talento de los jóvenes
Los jóvenes emprendedores de hoy no deben olvidar que la sociedad de la información y la era digital está signada por una lucha sin cuartel entre viejos y nuevos paradigmas empresariales. Reconocerlos implica algo más que voluntad para ubicarse en el proceso permanente de cambio.
Es lo que anhelo para el emprendedor peruano: que siempre mire su entorno para no perderse, que esté en sintonía con lo que pasa en el mundo observando las tendencias y asimilando sus lecciones. Esa es la manera de encarar los problemas, encontrar oportunidades internacionales y prepararse mejor.
A los jóvenes del Perú les pido que disfruten de la maravillosa decisión de ser emprendedor y triunfar en un mundo global y digitalizado. Si esto ocurre me sentiré gratificado, porque no hay nada más fascinante que ser promotor de la creación y el despertar del talento de los jóvenes, de descubrir su naturaleza emprendedora, de fortalecer su educación y mejorar su calidad de vida.
*Extracto de Perú: país de emprendedores. Raúl Diez Canseco Terry.
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